’ Capítulo 30
Capítulo 30
Para ser honestos, Lucrecia era una mujer muy bella.
Si Fiorella estuviera frente a Lucrecia, probablemente ni siquiera seria digna de atarle los zapatos a una mujer tan hermosa.
Lucrecia llevaba un vestido blanco, su largo cabello negro cais sobre sus hombros, y su rostro era bastante atractivo, una lástima que sus ojos almendrados estuvieran hinchados y enrojecidos, mientras miraba a Beatriz con una expresión poco amigable
Beatriz ya se habla preparado mentalmente para esta situación.
Después de todo, veinte millones… una suma tan astronómica no era tan fácil de conseguir.
“Estos dias he estado pensando, dijo Lucrecia acercándose a Beatriz, con una voz intencionalmente baja, unos ojos almendrados que estaban llenos de hostilidad al mirar a Beatriz. “¿Acaso Javier se quedó ciego para fijarse en una mujer de tu clase?”
Beatriz volteó la cabeza hacia Lucrecia.
Sing
se equivocaba en sus indagaciones, la familia Moseinco no empezó siendo tan distinguida, certo?
La familia Moseinco ni siquiera era tan prominente como la familia Marchena al principio. La joven y hermosa Camila se casó con el abuelo Pablo, quien apoyo de diversas formas a los hermanos de Camila. Con un respaldo tan formidable, la familia Moseinco gradualmente se elevő, permitiendo que Lucrecia se convirtiera en una distinguida señorita.
Lucrecia estaba acostumbrada a imponer su voluntad en la famila Maseinco, naturalmente se consideraba a sí misma como la señorita de la familia. Property © of NôvelDrama.Org.
Ella observó a Beatriz con una mirada llena de desprecio. “Si no me equivoca, tú eres lo que se dice una intrigante, ¿verdad? Usando tus antimañas para atrapar a Javier y ahora rehusándote a soltarlo, no es asi? Por fuera pareces inocente y vulnerable, pero por dentro estás llena de manipulaciones.”
Beatriz permaneció en silencio.
Recién llegada y encontrándose con un conflicto con Lucrecia el primer dia definitivamente causaria una mala impresión entre los mayores de la familia.
Si Beatriz no se equivocada, Lucrecia en este momento estaba tratando de provocarla deliberadamente, probablemente con la intención de llevar el asunto ante el abuelo Pablo.
En ese momento, la mujer notó una figura elegante y alta no muy lejos.
“Bueno, está bien.”
Ya que Lucrecia decía que era una intrigante, entonces se lo demostraria.
Beatriz se llevó una mano a la frente: “Señorita Lucrecia, me siento un poco mareada.”
Lucrecia sonrió con desden. “intentas dar lastima frente a mi? Ese truco
- funciona conmigo.
Beatriz, apoyándose en su frente, realmente parecia frágily vulnerable, como una perla bajo la lluvia.
Ella camino hacia Javier, tropezando débilmente frente a Lucrecia, y de repente se tambaleó hacia los brazos del hombre.
Sus ojos de inmediato se llenaron de lágrimas: “Lo siento, Javier, solo hablé un momento con la señorita Lucrecia y de pronto me senti mal.” Lucrecia se quedó asombrada.
Ella acababa de llamar a Beatriz intrigante” en un momento de ira, intentando provocarla y llamar la atención de los mayores de la famila Mangone.
“No esperaba que Beatriz malmente actuara de esa manera.
Javier rodeo con un brazo los hombros de Beatriz, su apuesto rostro mostrando una expresión de afecto perfectamente calculada: “Qué delicada, vamos a descansar a la habitación.”
Lucrecia abrió la boca sin saber qué decir.
No sabia qué habla hecho mal, pero terminó siendo forzada a presenciar esa escena de amor no deseada.
Luceda miró a Javier con certa tristeza
Ella le habia conocido durante muchos años, desde que era pequeña había estado enamorada de él.
Y nunca, ni una sola vez, habia visto a Javier tratarla con tanta ternura.
Cada vez que Lucrecia hablaba con él lo único que recbla era su gelida Indiferencia.
Ella, de forma insuntiva, se interpuso entre Javiery Beatriz.
La actitud de Javier hacia ella se enfrió de inmediato: “Permiteme pasar